miércoles, 6 de mayo de 2009

Mis diálogos con Allen



Música: Mack The Knife
Imagen: Van Gogh!

Calor y alergia mala combinación…
Para rematarlo mi chocolate con almendras se ha convertido en fondue por dejarlo cerca de la salida del ventilador del portátil…

Me pican los ojos, me remuerde la conciencia y las ideas no me dejan en paz.

Quiero mar… y olor a sal.
Quiero sonetos y Gnossiennes.
Quiero un pastel de impresionismo con toques cubistas que huela a Fa Mayor.

Me imagino a mi misma con Woody Allen manteniendo algún tipo de conversación.
Tantas ideas perturbadoras en la cabeza para acabar sintetizadas en formas de preguntas…

"De dónde venimos? ¿a dónde vamos?, ¿hay posibilidad de tarifa de grupo?". W.A

Sería todo un acierto, aunque luego tendríamos una descompensación brutal en los grupos.
En uno estarían los inteligentes, y en el otro la población mundial.

Aunque según él las divisiones irían por otro lado,

"Yo creo que la vida está dividida en lo horrible y lo miserable. En esas dos categorías. Y lo horrible son los enfermos incurables, los ciegos, los lisiados... No sé cómo pueden soportar la vida, me parece asombroso. Y los miserables somos todos los demás. Así que al pasar por la vida deberíamos dar gracias por ser miserables. Por tener la suerte de ser miserables". W.A

Desde luego el que no se consuela es porque no quiere…
Por supuesto intentaría no tocar el tema del amor, porque ya conozco su escala de prioridades

"Lo mejor que te pueden decir en la vida no es 'Te quiero' sino 'Es benigno'"

Mmm… lo mejor que me pueden decir en la vida… esto sería algo para meditar seriamente.

Quizás “Vaaaya, nunca pensé que tuvieras tanta suerte!”

Sí, porque yo estoy dentro del grupo de personas cuya buena suerte brilla por su ausencia.
Está la gente que se encuentra por la calle dinero, el amor eterno o un libro secreto y luego estoy yo que sólo me topo con chicles en la suela de los zapatos, gente que me pide un euro o ejemplares de La Razón…

Desde luego algo falla, he debido hacer algo mal y lo estoy pagando con creces ¿pero qué?
¿Escuchar más de una canción de la Spice Girls en mi adolescencia? ¿Preguntar: ‘de Schubert o de Bisbal'? ¿Haber visto demasiadas veces ‘Abajo el Amor’? ¿Hacerme la coja para utilizar el servicio de minusválidos? No, miento, esto no lo he llegado a hacer nunca (pero lo he pensado demasiadas veces ya!)

Mejor dejo de planteármelo porque no llegaré a ninguna conclusión fructífera, intentaré pues valorar aquello bueno que tengo (parece que hay algunas cosas xD) y me río porque recuerdo otra buena frase de Allen:

"Yo me crié en la confesión israelita, pero al hacerme adulto me convertí al narcisismo".

¿Sabéis de dónde viene la palabra “Narcisismo”?
Se la inventó nuestro querido Freud, ‘la palabra procede del antiguo mito griego sobre el joven Narciso, de especial hermosura, quien se enamoró insaciablemente de su propia imagen reflejada en el agua.’

Enamorarse de uno mismo tiene ciertas ventajas, por ejemplo, te eres fiel toda la vida, a no ser que de pronto un día te levantes y no te soportes… entonces es cuando llegan los serios problemas porque aún no se ha inventado el divorcio unipersonal!

¿Os imagináis?

“Señor juez, no soporto más ver la misma cara cada mañana, escuchar esta voz todos los días que me influencia hacia lo que no debo hacer y cuando lo hago me critica por hacerlo… Luego está el sexo… que… hombre, tanto tiempo juntos que sé perfectamente lo que me gusta pero ¡nunca tengo todo lo que quiero! y lo que es peor aún, llevo toda mi vida conmigo mismo y cada día me entiendo menos!”

El juez después de una breve reflexión responde:

“Se sorprendería de cuantos divorcios normales he concedido por esa misma razón...”

Y si no tenemos amor eterno y no aceptamos el narcisismo, ¿qué nos queda?

Iré a pensar sobre ello, y sobre lo que quiera que me esté pidiendo mi estómago con esta sinfonía gástrica.

Sed felices! pero sin pasaros eh? Que luego llegan las desilusiones! :P

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