domingo, 14 de septiembre de 2008

Una mañana de Domingo

No hay nada mejor que levantarte tarde un domingo por la mañana, quedarte en la cama remoloneando y viendo como por la ventana luce un bonito día soleado.
Luego tomar unas buenas tostadas con mantequilla y mermelada mientras lees el periódico y su suplemento semanal.
Ojeas los titulares mientras piensas lo mismo de siempre "el mundo está loco, aunque aún hay esperanza".

Luego me puse a echar un vistazo a una publicidad de coleccionables de cuentos de Teo. Qué recuerdos, aún me acuerdo de cómo subían un piano en unos grandes almacenes, y de que yo no paraba de leerlo una y otra vez con la misma fascinación del principio.
Ahora leo cosas totalmente distintas, prefiero sumergirme en personajes más complejos con historias peculiares que acechan misterios y se enfrentan a sus propios miedos... La edad, supongo.

Vuelvo a echar un vistazo a la revista del país semanal y me topo con un anuncio de barras de labios, cuya imagen publicitaria es un tacón rojo de aguja al lado de una barra de labios del mismo tono. Haciendo un símil con la feminidad. Rápidamente recordé una conversación que he tenido en varias ocasiones, y es esa del estrecho límite entre el feminismo y la coquetería. Parece ser que para ser una mujer del siglo XXI, (independiente, madura, decidida...) y tener los mismos derechos que nuestros colegas, los hombres, hay que borrar todo indicio de feminidad. Ya que la feminidad, la coquetería, el gusto y el estilo parece estar demasiado relacionado con la frivolidad. Y digo yo... ¿no será lo ideal buscar un término medio? ¿No puedo ser una mujer con unos principios e ideas bien claras, con cierta cultura, con valores arraigados como la independencia y además preocuparme por mi aspecto y ser coqueta?
Meteos esto en la cabeza: para tener los mismos derechos que los hombres, no tenemos que ser hombres. Tenemos que ser mujeres, y como tal la sociedad así lo debe entender. Es muy triste que para llegar a tener un trabajo de alta responsabilidad haya que dejar de lado otras cosas tan gratificantes como tener una familia. Y sino, miren cuántas políticas tienen hijos y compárenlo con el número de hijos de políticos. Ni punto de comparación.
Supongo que llegará el día en que las piezas empiecen a encajar. En el que se dirá, somos iguales en derechos, en capacidad de esfuerzo y sacrificio, pero diferentes en muchos otros niveles. La naturaleza nos hizo así, y es siendo consciente de estas diferencias donde debe empezar el reparto de tareas y comprensión social general.

Todas esas ideas pasaban por mi mente cuando saboreaba la mermelada de mi tostada y miraba fijamente aquel anuncio.
Pasé de página y me encontré con varios artículos referentes al cine, y me di cuenta de lo mucho que echo de menos la gran pantalla. Hace más de un mes que no piso una sala de cine, y no ha sido por falta de películas que me interesen.
De hecho, mi prioridad se centra en la del Ché. Tengo ganas de sumergirme en la "revolusión" y deleitarme con un poco de Benicio del Toro.
El artículo, en realidad hablaba del papel de las estrellas latinas en Hollywood y la influencia del cine latinoamericano en general.
Pero mi vista sólo pudo reparar en un párrafo "Alejandro González Iñárritu va a rodar su próxima película en Barcelona". En poco tiempo, este hombre se ha convertido en uno de mis directores predilectos.
Hace el tipo de cine que yo denominaría "mi debilidad cinematográfica" thrillers cargados de lecturas sociales, críticas a gran escala, comparaciones entre distintas sociedades... todo enlazado en una historia con montaje peculiar donde las piezas siempre encajan al dedillo (aunque sólo al final), que te hace pensar y reflexionar durante toda la película, y te deja ese sabor agridulce de que todo está conectado, relacionado y tu vida no depende sólo de ti, sino de muchos otros factores y personas que un día miras por encima del hombro, y al siguiente son tu única posibilidad para sobrevivir.

Debería haber mucho más cine de este, y menos de estupidez variada. Aunque claro, todo va en relación con el público. Hay mucha más gente que prefiere ir a ver tiroteos y efectos especiales sin que le metan ideas en la cabeza, que sentarse y dejar que le critiquen en sus narices para hacerle reaccionar.

Pero en ese momento, yo sólo pensaba en el qué y en el cuándo.
¿De qué va su próxima película? ¿Cuándo empieza ese rodaje?
¿Podré escaparme y echar un vistazo?
La verdad es que el primer rodaje en el que estuve (The Kingdom of Heaven) me dejó muy buen sabor de boca, así como autógrafos de Ridley Scott, Jeremy Irons y Orlando Bloom) así que mi pequeña cabecita y toda su maquinaria neuronal ya se ha puesto en marcha para ver las posibles variantes de este plan.
Ya será el señor don Google quien me informe de todo lo necesario.

Y es que tengo unas ganas de viajar...! Que no os lo podéis ni imaginar. Sí, quiero conocer mundo.
Y tengo que darme prisa, que el 2012 está a la vuelta de la esquina (Y lo que diga Chris Carter y los Mayas, va a misa xD).
Hablando de Chris Carter, aún no he hecho una crítica como Dios manda de XF2, IWTB, la explicación es sencilla. No he logrado reunir los suficientes eufemismos y la cantidad necesaria de sutileza como para que después de redactarla la gente de mi web siga queriéndome hablar :P
Es broma, esperaré a un quinto visionado en dvd para intentar exprimirle el jugo necesario como para sacar un balance positivo.
Y obviar las obviedades de "rusos gays y raperos negros".
(Aunque ahora que lo pienso, anda que no hubiera quedado guay raperos gays y rusos negros!! xD Qué poca imaginación Chris... a ver si al menos para XF3 metes a alguien con más caché que la Amanda Peet, por ejemplo... mmm... Madonna, aunque habrá que tener cuidado con David Duchovny que en un descuido se la estoo... -fin de pensamientos inquetantemente raros-)

Perdonadme, todo es culpa de las mañanas de los domingos. Hacen que una se levante leyendo el periódico tranquilamente y acabe desvariando peligrosamente.

Que le vamos a hacer, mi vida es un Expediente X!